Me permito un pequeño guiño al futuro a partir de algunas ideas que surgieron en el reciente taller 11S. Y es que pensando en cómo evolucionará una bici de doble suspensión enfocada a cross country, en cierto momento se habló de cables, ¡cómo no! Una bici, desde siempre, los ha necesitado, sean relativos a los frenos, a la transmisión o a otros elementos de control. Pero, claro, el futuro (más bien el presente) es digital. Así que, ¿no sería lógico pensar en una bici inalámbrica? La electrónica seguirá ganando terreno y cabe pensar que llegará el día en que no veamos cables.
Hoy en día ya se ocultan. De hecho el paso interior de cables a través de los tubos es habitual. Pero de lo que estamos hablando es de aplicar la primera ley de la simplicidad: lo que no existe no se puede estropear. Si no hay cables, adiós a desgastes, diseños para que se introduzcan adecuadamente en los tubos y otros quebraderos de cabeza. Eso sí, vendrán nuevos retos derivados de la propia electrónica.
Lo que también parece lógico es que cada vez más el lado social de la tecnología se agigante a través de una gestión inteligente de la información que se genera alrededor de la práctica del MTB. Aquí en este mismo blog ya hemos comentado cómo Strava, a modo de ejemplo, es quien a día de hoy maneja esa información como nadie. Las comparativas con otros colegas, el pique (tan consustancial al ciclismo) o la posibilidad de saber quién se mueve por nuestra misma zona son aspectos vitales en este mundo made in Facebook, Instagram y compañía.
La tecnología hará que nuestras bicis, sin cables a la vista, se conecten entre sí, al igual que ya lo hacemos quienes practicamos ciclismo. Una amalgama de datos, machine to machine M2M, provenientes de sensores que no seremos capaces ni de saber que están ahí. Los GPS vendrán de serie y aquella máquina antes llamada bicicleta quizá se reinvente en algún otro artefacto que deberá tomar incluso un nuevo nombre. ¿Estamos elucubrando demasiado? Puede que más pronto que tarde asistamos a la revolución inalámbrica de las bicis conectadas. Smart bicycles que serán transversales a cualquier sector: MTB, bici de carretera, urbanas o de cualquier otra modalidad.
La imagen está tomada de: https://www.wallpaper.com/design/cycling-our-way-to-the-future