Cuando hemos analizado el sector del MTB dentro del marco conceptual de la tesis doctoral, lo hemos hecho siendo conscientes de los movimientos tectónicos que están ocurriendo. Siempre se hace referencia a la turbulencia del entorno y al cambio permanente como marco obligado de trabajo, pero creo que aquí no queda otra que reconocer que es así. Después de estos casi tres años con el doctorado, aportamos nuestra perspectiva de por dónde se va a mover (y en algunos casos, «se está moviendo») el sector del MTB. Por supuesto, es una visión muy particular. Se admiten críticas, claro está 😉
Algunas de las tendencias que muestro pueden ser generalizables al sector de la bicicleta mientras que otras hay que entenderlas específicamente ligadas al MTB.
1. La bici eléctrica: el producto
La asistencia al pedaleo derivada del uso de motores y baterías integrados que «no se ven» cambia las reglas. Casi cualquier modelo puede ser asistido, no hay límites. Las bicis se redefinen como producto.
2. La bici eléctrica: reconfiguración del sector
La irrupción de nuevos agentes en el sector, como consecuencia del crecimiento de la bici eléctrica, redefine el sector desde muchas perspectivas. No, no va a ser igual: los nuevos players son grandes potencias empresariales. Habrá que ver cómo quieren jugar en el tablero.
3. Datos, datos y más datos
Ahí, en los datos, surgen importantes oportunidades de negocio. La pelea por acceder a ellos y explotarlos está ahí. Ahora mismo, al margen de los datos que posean tiendas físicas o portales online o lo que una marca sea capaz de conseguir, el que está en mejor posición es Strava.
4. Experiencias de compra y más allá
Cada vez es más importante proporcionar una experiencia con la que el consumidor se sienta encantado. Tiene que ver con el proceso de compra, pero también con el contacto con la marca, con poder tocar y probar el producto, con el acceso a sistemas ágiles de atención al cliente, con todo. Experiencias en el mejor sentido que se os ocurra. Y, ojo, porque la tienda física tiene que reencontrar su sitio junto a los gigantes de la distribución online.
5. Nichos, nichos y más nichos: markets-of-one
Cuando parece que ya no hay más posibilidad, aparece un nuevo nicho. Ha pasado con las fatty bikes, con las plus o con el gravel. Y seguirá pasando. Los mercados se concretan en cada vez más nichos hasta llegar a la customización masiva. El MTB deberá ser entendido, en gran manera, como un típico market-of-one.
6. Experiencias más allá del MTB: turismo sostenible
El sector del MTB entendido como un medio para un fin: contribuye a otro tipo de turismo, alejado de la masificación y coherente con valores de sostenibilidad. El estilo de vida que acompaña a la practica del MTB abre un mercado con enorme potencial.
7. Experiencias más allá del MTB: vida saludable
La otra gran consecuencia de la práctica del MTB: nos conduce a una vida más saludable. Nutrición, entrenamiento, hábitos sanos, todo un corolario de posibilidades alrededor del MTB.
8. Cada vez mayor cultura maker
La ciudadanía de a pie cada vez dispone de mayores recursos para fabricar por ella misma sin recurrir a lo que ofrece la empresa tradicional. Y mientras la cultura del do-it-yourself crece y se habla de fabricación aditiva, las marcas tendrán que ver de qué forma aprovechan ese caudal.
9. Smart bicycle… o como lo quieras llamar
Las bicis incorporarán más y más tecnología. Veremos sensores que proporcionan datos (volvemos a la tercera tendencia) bien para quien fabrica o bien para quien usa la bici. Veremos mayor interacción de la bici con todo lo que la rodea, incluyendo los posibles ladrones 😉
10. El nicho de la MTB polivalente
Sí, se contradice en parte con la tendencia cinco, pero frente a la idea de profundizar en más y más nichos, la polivalencia en una bici actual de MTB puede tener premio. Ante tanta alternativa, una bici capaz de recoger (casi) lo mejor de diversos nichos puede tener sentido. All Mountain ya existe, pero creo que puede renacer como concepto.
Bola extra
Dejamos una bola extra para girar la mirada hacia la industria 4.0. Sí, claro, lo doy por supuesto. Porque, hoy o eres industria 4.0 o no eres 😉
Bueno, yo cuento algunos detalles que he observado, sin saber si son tendencias. A pesar de que copan los dos primeros lugares, creo que no has dado suficiente importancia a la irrupción de las eléctricas 😉
– Van a influir en la redefinición del espacio urbano. Los bidegorris se van a quedar muy muy pequeños. La creación de calles sólo ciclables y la segregación de carriles planea en el horizonte.
– Hay tiendas que ya ofrecen el montaje del kit chino por 100€. Esto irá al alza. Te compras el equipo de electrificación donde quieras y tu tendero local te lo instala y te lo mantiene. Si ya había quien no tocaba una llave ni bajo tortura, con la electrificación, más aún. Nuevo hueco de mantenimiento para las tiendas locales.
– Una vez electrificado, los datos de strava no importan una mierda. Ahora se supone que son para mejorar en el rendimiento (como si eso fuera posible a las provectas edades de los ciclistas de montaña). Pero luego… ¿pa qué?
– electrificación custom: Ya hay artesanos de la batería de litio, y eso irá en aumento. Te repartirán 25Ah. en cuatro lugares del cuadro y bajaran el centro de gravedad como si fuera un ferrari. Bicis más estables y radio de 100km de autonomía sin despeinarse.
Lo mismo con los bobinados de los motores. No tiene mucho sentido aumentar la velocidad (a ver quien es el guapo que va a más de 50km/h) pero si aumentar la potencia para afrontar los innumerables tramos de más del 30% de desnivel que nos rodean.
Y así.
Entraremos en el futuro montados en una bici eléctrica!
Me alegro de que veas un futuro tan prometedor para un vejestorio como yo jajajajaja.
No, en serio, muy interesantes estos apuntes tuyos en materia de bici eléctrica. Ya ves que yo no lo veo y por eso solo le dedicaba dos puntos ?
qué interesante Julen.
Mira que pensando en marca, fíjate hasta dónde puede extenderse una marca que fabrica bicis …¿no te parece apasionante?
La aspiración es evidente pero la ruta complicada aunque, desde luego, la mar de interesante jeje